En el sector inmobiliario, la tasación de viviendas y propiedades está a la orden del día. Cuanto más se facilite y automatice esta gesti...
En el sector inmobiliario, la tasación de viviendas y propiedades está a la orden del día. Cuanto más se facilite y automatice esta gestión, más se pueden acelerar el resto de los trámites que implican comprar o vender inmuebles. En este post queremos hablarte y profundizar en la tasación automatizada.
La tasación convencional
Hasta el momento, un proceso de tasación siempre ha comenzado cuando un particular o una empresa hacen una solicitud y el tasador, tras comprobar la nota simple del registro de la propiedad y la copia de la escritura de la vivienda, examina los datos y los comprueba en el catastro y en el ayuntamiento correspondiente.
A continuación, el tasador realiza una visita a la vivienda y determina el valor de la vivienda teniendo en cuenta los siguientes factores:
• Ubicación de la vivienda.
• Estado del edificio.
• Superficie total de la vivienda.
• Característica de la iluminación.
• Distribución.
• Si el edificio tiene ascensor.
• Calidad y estado de las ventanas.
• Precios de viviendas similares en la misma zona.
Con toda esta información, el tasador realiza un completo informe en el que valora el inmueble, acorde siempre a la normativa y los índices de calidad.
La tasación automatizada
En 2018 el Banco de España anunció que iba a empezar a exigir a las tasadoras el uso de un sistema automatizado de tasación, algo ya común en otros países. El sistema propuesto en concreto es el Automated Valuation Model (AVM) que consiste en la valoración masiva de carteras de activos por medio del algoritmo de valoración del Instituto de Valoraciones tomando como referencia bases de datos históricas de tasaciones.
SMARTA es el sistema que lleva a cabo el procesamiento y análisis de los datos, usando herramientas como el Big Data o la Inteligencia Artificial.
Con la tasación automática se obtienen dos valores de cada propiedad; el de mercado y el hipotecario teniendo en cuenta los mismos factores que ya se valoraban en la tasación convencional.
Ventajas
Estas son los beneficios que aporta usar este tipo tasación:
. El proceso de tasación se agiliza.
. Los costos totales de la gestión se reducen, puesto que se elimina la figura del tasador.
. Complementa otros procesos como las concesiones de hipotecas o la valoración real de viviendas provenientes de embargos o desahucios.
Desventajas
Estas son los contras que puede tener usar la AVM:
. Algunos factores, aquellos que requieren la intervención humana, pueden no tenerse en cuenta a la hora de la valoración, como el estado de conservación del edificio, reformas posteriores, metros cuadrados realmente útiles, etc.
. Este tipo de tasación sólo es aplicable en viviendas o propiedades construidos de forma masiva, no en inmuebles únicos con características concretas o especiales.
Como ves, todo tiene sus pros y sus contras, y también la tasación automatizada o AVM, pero está bien utilizar la tecnología en los casos adecuados para facilitar trámites en los procesos de adquisición y venta en el sector inmobiliario.
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