¿Qué nos hace falta a las inmobiliarias para ser competitivas y sustentables?

¿Qué nos hace falta a las inmobiliarias para ser competitivos y sustentables

Cada vez que nos enfrentamos a una crisis, nos damos cuenta de las limitaciones que adoptamos en los momentos de estabilidad. Falencias que tienen que ver con nuestra baja productividad, desactualización tecnológica, o falta de optimización de procesos. 

Los empresarios, en especial los inmobiliarios, somos esforzados por naturaleza. Ya hace varios años nos enfrentamos a múltiples dificultades, y para colmo llegó la pandemia, con sus consecuencias. Pareciera que para las pequeñas empresas (en especial los inmobiliarios) se han incrementado los problemas y a veces no sabemos como enfrentarlos.

Hay otros caminos. La colaboración con otros profesionales, no solo de nuestra actividad, sino también de las vinculadas (arquitectos, escribanos, abogados, diseñadores, urbanistas, agrimensores, contadores, etc.). Aprender de los errores de los demás y aplicar las mejores prácticas funciona mejor que inmolarse. 

No es necesario reinventar la rueda todos los días.

Para aprovechar las experiencias ajenas, primero hay que dar; seguros de que juntos somos más, empujamos más fuerte y logramos más tracción. Sin embargo, ¿cómo identificar con quiénes unir esfuerzos?, ¿en qué frentes?, ¿por dónde empezar?, ¿bajo qué iniciativas?

Para eso están las organizaciones gremiales empresarias/profesionales (Colegios, Cámaras, Centros y otras formas de agrupación formal o informal, permanente o temporario); sirven de catalizadores para el desarrollo de los negocios. 

Pero muchos no los tenemos en el radar. Los vemos como instituciones y entidades que sirven de representantes del sector (que desde ya es uno de sus roles), desconociendo que su capacidad de articular es infinitamente mayor. Son quienes generan la fuerza colectiva.

Organizaciones profesionales y reactivación

Un papel fundamental de las Organizaciones profesionales es ser los voceros y representantes frente a las políticas públicas y diferentes actores gubernamentales. Frecuentemente en conversaciones con colegas y otros profesionales uno escucha que la gente se queja de la carga impositiva, de la burocracia, de la complejidad en requisitos exigidos para determinada actividad, de la falta de apoyo, etc. 

Unos con razón, otros no tanto. Independiente de eso, ¿cómo es el proceso de lobby que se hace desde nuestras Organizaciones para lograr transformaciones más estructurales?

Tenemos una mala costumbre al pensar en la participación en estas entidades/instituciones, lo primero que preguntamos es “¿que me van a dar?”, en lugar de preguntar “¿Qué puedo dar”?, y esto no se refiere a lo estrictamente monetario, sino también en lo referido a compartir experiencias y conocimientos, que seguramente pueden ser un aporte para el resto de esa comunidad. Brindar este servicio a nuestros colegas y amigos, con los que compartimos nuestra actividad diaria, nos enriquece a todos.

En la actividad inmobiliaria la gran mayoría somo Pymes o Micropymes, y a pesar de que todos debemos seguir el mismo camino, dar los mismos pasos para llegar a una estabilidad económica y emotiva, no somos muy afectos a trabajar de manera asociativa, colaborativa o a apoyarnos mutuamente. 

Simplemente enfrentamos estoicamente las adversidades solamente con nuestras limitadas fuerzas. En lugar de quejarnos que las Organizaciones empresarias/profesionales, ¿por qué no vemos de acercarnos para ayudar en esta integración y unión de fuerzas?

Como decía Warren Buffet, “Cuando baja la marea es que se sabe quién estaba nadando desnudo”. 

Cada vez que nos enfrentamos a una crisis, es cuando nos damos cuenta de las falencias y limitaciones que adoptamos en los momentos de bonanza o estabilidad. Estas falencias que afloran en muchos casos tienen que ver con nuestra baja productividad, desactualización tecnológica, o falta de optimización de procesos. 

A pesar que estamos en Instagram, Facebook, WhatsApp Business, y cuanta otra aplicación tenemos disponible. ¿Qué nos hace falta a las inmobiliarias Pymes para ser competitivos, sustentables, crecer y explorar otros mercados o productos? ¿No será esta una problemática para abordar en conjunto? 

Existen nuevas tecnologías que nos permiten trabajar colaborativamente, como el networking y otras variantes que debemos abordar rápidamente para no perder el tren frente a los clientes/pasajeros que ya están en el andén tecnológico esperando nuestras propuestas. Si no nos ocupamos de esto seremos el furgón de cola de evolución de las inmobiliarias y si no nos apuramos podemos ir a vía muerta.

Participar colaborativamente, es el nuevo paradigma. 

No esperemos que los demás lo hagan por nosotros. Debemos participar en las Organizaciones profesionales/empresariales y hasta en las regionales como las Cámaras de Comercio zonales, para que tengamos el lugar que merecemos y desde allí podamos efectuar el aporte que esta a nuestro alcance brindar a la sociedad toda.

Por Alberto Héctor Loyarte.
Martillero y Corredor Inmobiliario (Cucicba). Productor Asesor de Seguros.