Rosario, el microcentro y las galerías comerciales víctimas de la recesión
Las persianas bajas y los carteles de alquiler que permanecen en el tiempo son un indicador de la crisis que atraviesa el sector. La proporción de locales vacantes es en términos generales del 12,9%, aunque hay sectores que lo superan ampliamente (19,8%).
El microcentro rosarino y las galerías comerciales son las principales víctimas de la recesión económica y de consumo que la ciudad venía arrastrando en el año previo a la pandemia y que la llegada del Covid-19 terminó de profundizar.
La muestra de esa situación crítica está en la cantidad de locales comerciales vacíos a diciembre de 2020, un número que en las galerías alcanza el 22% y en el microcentro roza el 17%, muy por encima del 12,9% que arroja el total del relevamiento; mientras que en el área central la proporción desciende al 10,1 y en los centros barriales al 10,5%.
Los datos son el resultado de un muestreo sobre 290 manzanas llevado adelante por el Colegio de Corredores Inmobiliarios de Rosario (Cocir) y la Universidad Nacional de Rosario (Unr) con aportes del municipio, y que se propone por primera vez ofrecer al Estado una evaluación certera de la situación, que será de suma utilidad para la toma de decisiones.
La problemática no es ni nueva ni poco mencionada. Las persianas bajas y los carteles de alquiler que permanecen en el tiempo son un indicador que desde hace tiempo está en boca de comerciantes y corredores inmobiliarios, así como el fortalecimiento de los centros comerciales a cielo abierto de muchos de los barrios rosarinos, aunque no de todos.
Sin embargo, en la discusión las cifras que se manejan, señalaron dirigentes, investigadores y funcionarios, no siempre tienen la certeza que se requiere para transformarlas en un indicador estadístico confiable.
Ese fue el desafío que encaró el Cocir desde marzo pasado con la conformación del Departamento de Estadística, que en este caso trabajó no solo con la colaboración de 80 corredores inmobiliarios, sino además junto al Instituto de Investigaciones Económicas de la Facultad de Ciencias Económicas de la Unr y el Centro de Información Económica de la Secretaría de Desarrollo Económico y Empleo de la Municipalidad.
“Lo central es poder brindar un relevamiento serio que permita ser una herramienta útil para el Estado provincial y municipal”, señaló durante la presentación de la información relevada en diciembre Andrés Gariboldi, presidente del Cocir.
El secretario de Desarrollo Económico y Empleo, Sebastián Chale, no solo reconoció el trabajo “como una foto a diciembre de 2020 que muestra una situación grave, aunque no apocalíptica”, sino que además señaló “el desafío de sostenerlo año a año, de modo tal de convertirlo en un indicador que permita llevar adelante futuras comparaciones”.
Sobre la necesidad de pensar la reconversión del centro de la ciudad, señaló que es “un tema que claramente está en el debate y así lo marcan los anuncios hechos en las últimas semanas, que se traducirán en proyectos en el Concejo Municipal”. No obstante, reconoció que tener los datos “aumenta su prioridad en la agenda”.
El panorama de un “escenario grave”
Las 290 manzanas relevadas para detectar la situación de los locales comerciales con vidrieras a la calle, y solo en el primer piso en el caso de las galerías, se repartieron entre el área central, delimitada por Pellegrini, Oroño y el río; el microcentro, encuadrado entre España, San Lorenzo, Buenos Aires y Mendoza, 25 galerías comerciales y nueve corredores comerciales barriales.
De ese universo, las galerías y el microcentro son sin dudas los que presentan una mayor proporción de locales vacíos, incluso con un 22% y un 17%, respectivamente, muy por encima del resultado total, que es del 12,9% y que presenta en las áreas incluidas la existencia de 1.145 locales vacantes sobre un total de 8.903.
Si bien los participantes coincidieron en señalar que el panorama es de un “escenario grave”, dejaron en claro que no se trata solo del resultado de un 2020 de pandemia, aislamiento y restricciones, sino “del arrastre de una situación de recesión previa y cambio en los hábitos de consumo de los rosarinos que incluso se aceleraron, como es la compra a través de plataformas digitales”, dijo Paula Báscolo, integrante del equipo de investigadores de la Unr.
El nivel de recaudación por el pago del Derecho de Registración e Inspección (Drei) cayó entre noviembre de 2019 y el mismo mes de 2020 en todos los sectores de la ciudad. Sin embargo, el desplome se registró con mayor intensidad en las galerías (12,7%) que en otros corredores céntricos, como la peatonal Córdoba y Oroño (6%), Santa Fe (7%), San Luis (5,7%) y la peatonal San Martín (5%).
Es más, entre los ocupados, hay rubros que tienen clara preeminencia, como son los de indumentaria y productos textiles (20%), alimentos (19%), ya por debajo se ubican servicios de cuidado personal y belleza y servicios profesionales (12%), en tanto, las jugueterías y los bares aparecen varios puntos por debajo de la línea del 10%.
Sin embargo, tanto la pandemia como los 80 días de paro de colectivos a lo largo del año fortalecieron los corredores barriales y los comercios de cercanía, aunque no todos de la misma manera.
Si bien allí la proporción de locales vacantes es en términos generales del 12,9%, hay sectores que lo superan ampliamente, como Cafferata (19,8%), Córdoba al 2200 (17,5%), Mendoza al 2200 (16,2%) y Fisherton (15%).